La mayoría de problemas de convivencia que acontecen en los centros
educativos tienen su origen en las relaciones afectivas y sexuales entre
chicos y chicas, aunque al profesorado y, en conjunto, a la “sociedad
oficial” (profesorado, educadores y educadoras, padres y madres) se les
aparecen como otro tipo de problemas.
La ceguera del profesorado ante los procesos de socialización en las
relaciones afectivo-sexuales de los chicos y chicas impide tanto
identificar correctamente los problemas que acontecen en las aulas a
diario, como dar respuestas adecuadas a los mismos. A su vez, dificulta
que las niñas y niños tengan la oportunidad de vivir relaciones libres
de violencia, con la relevancia que ello tiene para su aprendizaje y
para el resto de su vida. Como decía Jesús Gómez:
Todas las chicas y chicos tienen derecho a una educación que les
permita desarrollar unas relaciones afectivo-sexuales satisfactorias y
no les condene desde su infancia a relaciones problemáticas antesala de
una vida insatisfactoria (2004: 139).
Para ofrecer esta educación, debemos considerar lo que la
investigación y el feminismo internacional plantean sobre las relaciones
afectivas y sexuales entre los y las jóvenes, y evitar las ocurrencias y
errores, frecuentes y nefastos, que encontramos en este ámbito.
En efecto, existe una grave confusión generalizada tanto en los
programas de promoción de la convivencia escolar (que no identifican la
raíz afectivo-sexual de la inmensa mayoría de los conflictos existentes)
como en los programas de prevención de la violencia de género para
adolescentes y jóvenes acerca de la violencia de género.
Estos errores empiezan en la propia concepción de la violencia de
género y su incidencia entre las personas jóvenes. Incluso en la
definición de la violencia de género que establece la Ley Española
contra Violencia de Género de 2004 (a pesar del indudable avance que
esta Ley supuso) ésta se limita a la que se da en relaciones estables,
sean presentes o pasadas.
Artículo 1. Objeto de la Ley
- 1. La presente Ley tiene por objeto actuar contra la violencia que, como manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres se ejerce sobre éstas por parte de quienes sean o hayan sido sus cónyuges o de quienes estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad, aun sin convivencia.
Sin embargo, la comunidad científica internacional no establece que
la violencia de género sea propia de relaciones afectivas estables, sino
que es propia de todo tipo de relaciones, estables o esporádicas, y que
se aprende fundamentalmente en las citas, relaciones esporádicas o “dates” (en inglés) en el término mayormente usado.
Si los asesores o asesoras que participaron en hacer la Ley (de
diferentes partidos políticos) hubieran consultado o tenido en cuenta
las evidencias científicas existentes habrían incluido, sin duda, las
relaciones esporádicas o “dates”) en la definición de violencia
de género. De hecho, posteriores leyes autonómicas han incorporado ya
esta forma de violencia de género.
Así,
diversas investigaciones han concluido que la violencia crea más
violencia, que quienes han sufrido violencia en su adolescencia tienen
más riesgo de sufrirla en su juventud y adultez; que la posibilidad de
ser víctima de violencia de género en la juventud tiene más que ver con
las primeras experiencias afectivas que con los posibles malos tratos
infantiles (Oliver & Valls, 2004; Smith, White, & Holland,
2003).
Para profundizar
Aubert, A., Duque, E., Fisas, M.; Valls, R. (2004). Dialogar y transformar, pedagogía crítica del siglo XXI. Barcelona: Graó.
Flecha, R., Puigvert, L., & Ríos, O. (2013). The New
Masculinities and the Overcoming of Gender Violence. International and
Multidisciplinary Journal of Social Sciences, 2(1), 88113.
Gómez, J. (2004). El amor en la sociedad del riesgo. Barcelona: El Roure
Oliver, E. & Valls, R. (2004). Violencia de género. Investigaciones sobre quiénes, por qué y cómo superarla. Barcelona: El Roure.
Oliver, E, Soler, M., & Flecha, R. (2009). Opening schools to all (women): Efforts to overcome gender violence in spain. British Journal of Sociology of Education, 30(2), 207-218.
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