Este
cuento escrito en 1936 por Munro Leaf. se centra en
dar un mensaje a favor de la paz, es un homenaje a la resistencia
pasiva y al antibelicismo. Recomendado para alumnos de entre 3 y
8 años.
EL
TORITO FERDINANDO
Vivía
una vez en España un
toro joven llamado FERDINANDO.
Todos
los demás toros jóvenes, con los que crecía, se pasaban el día
corriendo y saltando, dándose golpes unos a otros.
Ferdinando,
no.
Él
prefería estar tranquilamente sentado y oler las flores.
Su
lugar favorito estaba fuera, en el campo, bajo un árbol.
Allí se sentaba a la
sombra del árbol y olía las flores. . . . . su madre, que era una
vaca, se inquietaba algunas veces por él. Temía que pudiera
sentirse aislado así tan solo.
“¿Por
qué no no juegas con los demás toros jóvenes y te peleas con
ellos?”,
le preguntaba. . . . . . Pero Ferdinando movía la cabeza: “¿Me
encuentro más a gusto sentado tranquilamente y oliendo las flores.”
Su madre dejaba hacer lo
que él quería y ser feliz. . . . . Con el paso de los años
Ferdinando fue creciendo,
hasta hacerse muy grande
y fuerte.
Todos los demás toros se
peleaban unos contra otros constantemente; se empujaban con la cabeza
y se embestían. Sin embargo, lo que más deseaban . . . . . . era
que los dejaran participar en las corridas de Madrid.
FERDINANDO NO; seguía
sentándose tranquilamente en su lugar preferido y olía las flores.
Un
día aparecieron cinco hombres y venían a escoger al toro más
grande, veloz y fiero para la
corrida de Madrid;
.
. . . . . . . . . .
.
. . . . . . . . . .
Los
demás toros corrían dando vueltas, resoplando y empujándose,
realizando los saltos más atrevidos, para que aquellos hombres
vieran que eran muy fuertes y temibles y así ser elegidos.
Ferdinando
sabía que él no sería elegido y buscó su sitio preferido bajo la
encina para seguir descansando a la sombra.
Pero
no se fijó dónde se sentaba y se sentó sobre una abeja.
Y
la abeja le picó.
¡AY!
Ferdinando se levantó de un
brinco, dando berridos de dolor. Bramando y resoplando echó a correr
dando cornadas al aire como un loco.
Al
verlo, los cinco hombres gritaron de alegría. Era el cornudo más
grande y temible. ¡Precisamente lo que necesitaban para la
corrida de Madrid!
En
un carro se llevaron a Ferdinando.
¡Qué
día más alegre en la plaza de toros! . . . Las banderas ondeaban,
sonaba la música . . . .
y
todas las chicas guapas llevaban flores en el pelo.
Pronto
comenzó el desfile en la arena.
Primero
iban los banderilleros con unos palos de agudas puntas para pinchar
al toro.
Les
seguían los picadores con largas lanzas para ponerlo más
furioso.
Y
después apareció el matador;
se inclinó ante las damas. Sobre el hombro llevaba el trapo rojo y
con la espada debía darle al
toro la última estocada.
Poco
después salió el TORO. Era – – – – . Ferdinando.
Le
llamaban Ferdinando, el temible. Y todos tenían miedo de él
. . . . .
Y
el matador . . . .estaba
paralizado del susto.
Los
espectadores aplaudieron a Ferdinando porque pensaban que iba
a luchar terriblemente dando cornadas.
Pero
cuando Ferdinando llegó al centro de la arena, descubrió los
claveles en el pelo de las guapas y se sentó tranquilamente a oler
las flores.
Él
no estaba dispuesto a luchar ni a embestir como una fiera. . . . . .
.Estaba sentado pacíficamente en medio de las flores. . . . . Los
banderilleros y los picadores estaban furiosos. . .
Y
el matador estaba tan furioso que lloró, porque no podía torear con
el trapo y con la espada.
No
les quedó más remedio que llevar otra vez a Ferdinando al campo.
Y
todavía estará sentado hoy en su lugar favorito, bajo el árbol,
oliendo las flores. . . . . . Es muy feliz.
Autor
Munro Leaf.
Lóguez
Ediciones. Salamanca.
Algunas
actividades a realizar tras la lectura o el visionado pueden ser:
- Realizar una reflexión conjunta tomando como referencia las siguientes preguntas:
¿Qué
os ha parecido?
¿Cómo
os sentís escuchando esta historia, alegres, tristes, tranquilos,
con miedo, amor, . . . . ?
¿Me
podéis recordar la historia?
¿Os
gusta ser toro?
¿Os
gusta ser torero?
¿Os
gusta ser señorita con flores?
¿Qué
es lo que más os ha gustado de la historia?
¿Qué
hemos aprendido al escuchar esta historia?
¿Qué
es ENTRAR AL TRAPO?
¿Qué
es chinchar?
- Lemas filosóficos.
Cada
alumno inventa una frase que le haya sugerido el cuento ("La
violencia no es buena"; "No maltrates animales para
divertirte"; "Acepta a cada uno tal y como es";
"Respeta a los animales"; "Cada uno es feliz a su
manera";
"No
dejes de hacer las cosas que te gustan"...), la escribe en una
pancarta y se la explica a sus compañeros. Colocar todas las
pancartas en el pasillo, para que todo el mundo pueda leerlas.
- Un toro de cine.
Visionar
la película El toro Ferdinando (Walt Disney, distr. Buena Vista,
1966) y comentar las semejanzas y diferencias entre el filme y el
texto del escritor danés.
Representar
plásticamente a los protagonistas del cuento empleando la técnica
que cada uno desee: colages, dibujos, barro, materiales de desecho...
Me parece una historia fantastica con una moraleja excepcional de la que se puede sacar mucho provecho en clase. Muchas gracias.
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